En la temporada 1951-1952, la cantera del Real Madrid continuó su desarrollo en su segunda temporada desde su creación. Aunque esta etapa temprana de la cantera no presentaba la misma estructura y organización que la de hoy en día, sentó las bases para lo que se convertiría en una de las canteras más prolíficas del mundo.
Durante esta temporada, la estructura de la cantera se centró principalmente en los equipos juveniles. No hubo equipo de categoría Amateur, pero se mantuvieron activos dos equipos de Juveniles. Estos equipos juveniles brindaron a los jóvenes talentos la oportunidad de desarrollarse y progresar en un ambiente de entrenamiento y competición.
Uno de los aspectos destacados de esta temporada fue el papel del delegado para los juveniles, Vicente Pérez Klett. Su dedicación y liderazgo fueron fundamentales para el funcionamiento de los equipos juveniles y para el desarrollo de los jóvenes jugadores.
A pesar de las limitaciones en términos de estructura y recursos, la cantera del Real Madrid en la temporada 1951-1952 sentó las bases para futuros éxitos. Los entrenadores y el personal de apoyo trabajaron arduamente para brindar oportunidades a los jóvenes talentos y fomentar un ambiente de desarrollo y crecimiento.
Esta segunda temporada desde la creación de la cantera del Real Madrid fue un paso importante en el proceso de establecer una cultura de formación y desarrollo juvenil dentro del club. A medida que la cantera continuaba evolucionando, se hizo evidente el compromiso del Real Madrid con la identificación y el desarrollo de talento joven.
En resumen, la temporada 1951-1952 marcó otro hito en la historia de la cantera del Real Madrid. Aunque todavía estaba en sus primeras etapas, esta temporada sentó las bases para el crecimiento y el éxito continuo de la cantera, estableciendo un legado que perdura hasta el día de hoy.