Francisco Botella Montes, nacido el 17 de febrero de 1963 en Valencia, es un nombre que resuena en los anales de la historia del fútbol español. Su camino como defensa en la cantera del Real Madrid es una epopeya de valentía, determinación y compromiso con el deporte más hermoso del mundo.
La historia de Francisco comienza en la temporada 1980-1981, cuando se unió al Paterna C.F. en la Tercera División. Fue un año de aprendizaje y crecimiento para el joven defensa, donde adquirió las habilidades y la experiencia necesarias para enfrentarse a los desafíos que le esperaban en el futuro.
En la temporada siguiente, el destino lo llevó a las filas del Castilla C.F., el equipo filial del Real Madrid. Fue un momento de gran orgullo para Francisco, ya que tuvo la oportunidad de representar los colores del club más grande del mundo. Su talento y dedicación no pasaron desapercibidos, y pronto ascendió al primer equipo.
El año 1982 marcó un hito en la carrera de Francisco, ya que debutó en el primer equipo del Real Madrid. Fue un momento de celebración para él y su familia, un sueño hecho realidad para cualquier joven futbolista. Sin embargo, su tiempo en el primer equipo fue breve, y pronto fue cedido al C.D. Castellón en Segunda División.
A pesar de estar lejos del Bernabéu, Francisco demostró su valía en el Castellón, consolidándose como un pilar en la defensa del equipo. Su determinación y su ética de trabajo lo convirtieron en un favorito entre los aficionados, y pronto se ganó un lugar permanente en el once titular.
Las temporadas siguientes vieron a Francisco regresar al Castilla C.F., donde continuó su desarrollo como jugador. Sin embargo, su tiempo en el equipo filial fue interrumpido por una segunda cesión al C.D. Castellón, donde continuó impresionando con su habilidad en el campo.
En 1985, Francisco dio el salto a la Primera División al unirse al Hércules C.F. Fue un momento emocionante en su carrera, ya que tuvo la oportunidad de enfrentarse a algunos de los mejores equipos y jugadores del país. A pesar de los desafíos que enfrentó, Francisco demostró una vez más su valía como defensa sólido y confiable.
Su tiempo en el Hércules fue seguido por una etapa exitosa en el Real Murcia C.F., donde se estableció como uno de los mejores defensas del equipo. Durante cuatro temporadas consecutivas, Francisco fue una figura clave en la defensa del Murcia, ayudando al equipo a mantenerse en la Primera División y a competir en la élite del fútbol español.
Después de su exitoso paso por el Murcia, Francisco pasó temporadas en el Real Murcia C.F., antes de dar un paso atrás y jugar en equipos de divisiones inferiores como el Torrevieja C.F., Benidorm C.D. y S.D. Huesca.
La carrera de Francisco Botella Montes es un testimonio del poder del trabajo duro, la determinación y la pasión por el fútbol. A lo largo de su carrera, enfrentó numerosos desafíos y obstáculos, pero nunca perdió de vista su objetivo de alcanzar la grandeza en el deporte que amaba. Su legado vive en cada joven futbolista que sueña con seguir sus pasos y representar al Real Madrid en los escenarios más grandes del fútbol mundial.